No, nunca conocí al señor Kushner, ni a la señorita Aramayo, ni a sus señoras madres, ni tengo relación alguna con el caso que ha tomado por asalto todos los medios de comunicación y redes sociales hasta el franco hartazgo. Y la verdad, lamento mucho tener que empezar esta entrada de mi blog disculpándome por no tener una posición cerrada y militante al respecto como parecen haberla adoptado casi todos los que conozco.
La figura del feminicidio en la legislación boliviana es una cosa muy particular. Comete este delito quien mata a una mujer a la que conoce (o si prefieren, para mayor precisión, si la víctima conoce al asesino). Punto. Eso es todo. La acción típicamente antijurídica y culpable que nos enseñaron en la universidad a los que perdimos cinco años de nuestras vidas estudiando un Derecho que ha dejado de existir por completo en la última década no tienen nada que ver aquí. Tampoco, aparentemente, la presunción de inocencia. El sólo hecho de haber nacido con pene es suficiente prueba de preterintencionalidad en este delito.
No me malentiendan. Antes de que se me tilde de cerdo chauvinista, quiero dejar bien en claro que ciertamente no es eso de lo que estoy hablando. La violencia sexista es, existe y se manifiesta con enorme fuerza en Bolivia, todos los días, sin tregua, y urge tomar medidas muy serias para contrarrestarla, para prevenirla, para hacer que pare. La Ley 348 ciertamente hasta ahora no ha logrado absolutamente nada. Pero rasgarnos las vestiduras con un caso – todavía medio oscuro – y no ver a la mujer que murió con 25 puñaladas evidentemente proferidas por su marido, sólo porque no es hija de una periodista conocida, es el colmo del cinismo.
Y de esto es de lo que quiero hablar ahora. Del caso en particular que se ocupen quienes tienen esa responsabilidad, yo no soy quien para juzgar ni condenar a nadie en particular. Pero si algo ha sacado a luz este tema, es lo profundamente hipócritas, morbosos e influenciables que somos como sociedad. Casi todo el mundo tiene una opinión sobre este tema, pero muy pocos tienen una opinión propia. La enorme mayoría solamente repite la opinión de otro. Lo que es peor, es que todo lo que se dice son solamente opiniones. A nadie le importan los hechos, las pruebas, la lógica. “Kushner no pudo haberla matado, yo lo conozco y es buen tipo”, “Kushner es un maldito asesino, de ninguna manera un auto destroza solito a una mujer”, o mucho peor. Mucho, mucho peor. “Kushner es el asesino porque es judío”. Realmente, este caso saca lo peor de todos nosotros.
De nuevo, no sé si el señor éste sea o no culpable. Ante los ojos de la ley, ya está sentenciado. Con las presiones políticas, no del gobierno esta vez, sino de la misma sociedad civil, ya está condenado. Y si sus abogados se atreven a salvarlo de la cárcel, o incluso reducir su sentencia, ya está ejecutado. Seguir en este juego es pues absurdo. Sí creo oportuno, en cambio, preguntarnos por qué.
Creo que Kushner es necesario para exorcizar a nuestros propios demonios, es quien hemos elegido como sociedad para expiar nuestras culpas. Que él sea culpable o no, es irrelevante. En él proyectamos toda nuestra hipocresía. Él representa todo lo que somos, pero que no admitimos. Culpable o no, Kushner es nuestro Caifás, nuestro Darth Vader, nuestro Gran Visir Jaffar. Amamos odiarlo, porque representa todo lo que odiamos de nosotros mismos. El poderoso caído nos compele demasiado. Si el poderoso cayó por hacer daño a la princesa, mucho peor. Ésta historia la conocemos, la hemos escuchado cientos de veces en los cuentos que nos contaban de niños. La mujer apuñalada 25 veces no nos importa, porque “esa gente” suele comportarse así. Lo de Aramayo y Kushner nos duele porque ellos son los príncipes de los cuentos de hadas. La “gente bien” no puede caer en comportamientos de la chusma. Además de nuestra hipocresía, el caso ha desnudado nuestro clasismo/racismo (usted escoja cuál le calza mejor según sus propios prejuicios).
Pero el sermón no acaba aquí. No señor. Además de hipócritas y prejuiciosos, somos morbosos a más no dar. Sentimos un placer enorme, casi sexual, cuando nos hablan de cuántos kilos de presión se necesitan para reventar un cráneo. Nos lleva casi al orgasmo saber cuál de los dos estaba más borracho que el otro. Queremos saber la marca y modelo del auto que mató a la jovencita. Queremos tener todos los detalles de hacia dónde salpicó la sangre. La anticipación de poder ver lo que captaron las cámaras de seguridad nos extasía. Los dardos envenenados enviados entre doña Helen y doña Ninón nos solazan. Los medios lo saben, y nos darán todo esto y más, sin verificación de fuente, sin mesura, sin clemencia, matando y rematando a Andrea todos los días, traumando y retraumando a su hijita de siete años, y llenándose los bolsillos con ello. Banalizando el horror para que otros insensibles maten de nuevo para repetir la historia y seguir ganando platita. Y para contentar y alegrar a los poderosos, los verdaderos poderosos, a quienes les encanta que el pueblo se distraiga con estas desgracias para que todos nos olvidemos del dedito que nos han metido en… ya saben dónde.
Esto es lo que pasa cuando en un país que se dice democrático y republicano la justicia no funciona, cuando quienes se supone deberían cuidarnos de nosotros mismos se dedican a perseguir fantasmas, cuando el miedo se apodera de nuestra razón, cuando sentirnos seguros es más importante que ser libres, cuando tememos a nuestro vecino, cuando el gobierno nos dice todos los días que hay que tener miedo, mucho miedo, cuando los medios nos dicen todos los días “ahí está, mirá porqué tienes que tener mucho miedo”, cuando los poderosos te dicen todos los días “dame más poder para que te cuide como a un bebé”, cuando tus propios amigos, convencidos por el discurso del temor, te dicen que no salgas, que te cuides, que hay cada loco suelto, que los seres humanos somos asesinos ávidos de sangre, que los únicos que valen la pena son los perritos y los gatitos, que no confíes en nadie, que no celebres tu vida, que no ames a tu prójimo, que todos quieren hacerte daño.
Muchos han caído en la trampa. Muchos han manifestado abiertamente que no tiene caso, que si una Andrea Aramayo puede morir asesinada por su pareja, nadie está a salvo, la lucha contra la violencia machista está perdida, ganaron los patriarcas. Pues, ¿saben qué? Yo me rehúso absolutamente. Me rehúso a tener miedo de mi prójimo. Me rehúso a vivir atemorizado. No me trago su discursito hipócrita, prejuicioso y morboso. Me rehúso a dejar de luchar por hacer de éste un mundo mejor. Los seres humanos somos mucho mejores que esto. Los bolivianos somos mucho mejores que esto. Me rehúso a rendirme. Y creo que tú también deberías rehusarte. Especialmente si eres mujer.
Esteban
Carlos
26/08/2015
Excelente apreciación y una cruda realidad por mala suerte, creo que por este motivo el Telepolicial y Extra ya no son demandados por que los medios de comunicación los dejaron sin trabajo, sin respeto a horarios de protección al menor simplemente por ganar y tener mas rating.
Repito una verdadera y triste verdad.
Carlos Guido Villarroel Losantos
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Yurema Manzaneda Helguero
26/08/2015
Lo único objetivo y sincero que leí en estos días. Permíteme compartirlo.
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Esteban Morales B.
27/08/2015
Con todo gusto, ¡para eso es!
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einar
27/08/2015
Muy sensato, en una sociedad sin valores no es frecuente encontrar reflexiones tan inteligentes.
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Ella
27/08/2015
Gracias , me leiste la mente y me quedo con lo positivo.
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Rodrigo Rosa
27/08/2015
En este caso, no importa quien gane, Perdemos como sociedad y pierde la justicia, puesto que ya se ha causado un enorme daño a 2 familias, y ciertos preceptos legales no se han aplicado. Aqui ya no se trata de la fuerza de la razon y si de la razon de la fuerza. Sea esta social, politica, mediatica o economica.
Antes de conocer la evidencia, esta ya ha sido descalificada, por la presion activista y militante de prensa, familiares, amigos o la simple desconfianza publica en nuestra justicia. Y aqui no tomo partido, la presion existe, y de ambos lados. Al amparo de tal presion se han tejido muchas versiones (he leido al menos 4), sin sustento de mas evidencia que presunciones y simpatias (o antipatias), y la verdad, todas no pasan de simples teorias sin sustento de evidencia. Pero segun que partido se haya tomado, se asume que los otros han fabricado, comprado o alterado las evidencias presentadas o eliminadas.
Pero como sociedad, nos gusta linchar, sea al ricachon con apellido extranjero, al presunto ladron pobre, a la mujer promiscua, etc. no importa la etiqueta que le pongamos. Y la actitud linchadora la extendemos a la familia y simpatizantes del otro. No nos detenemos en los actores principales, perseguimos con saña a todos los relacionados con el objeto de nuestra antipatia.
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Enrique Salinas
27/08/2015
que asco ni puede llegar al final en dos parrafos lo condeno y recondeno….creo que ustedes son lo mejor que le ha pasado a William Kusher…para que vean cuan mala puedes ser sin conocer a una persona …yo no te conosco…pero …jamas apoyare el odio y resENTIMEINTO…LIBERTAD para WILLIAM KUSHNER!!!!
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Esteban Morales B.
27/08/2015
Quizás si leyeras hasta el final te darías cuenta de lo que estoy diciendo…
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Fredy Orellana
27/08/2015
Es lo más sensato que he leído en este lamentable caso. Todo lo demás (con contadas excepciones) entra como a una licuadora gigante que revuelve los ingredientes más malolientes que uno pueda imaginar… Lástima que la sensatez, como otros valores parecidos, es patrimonio de minorías individuales incapaces de influir de alguna manera en esa mayoría aplastante que define el destino de la sociedad en que vivimos… De todos modos yo también me rehuso.
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Marcos Vargas
27/08/2015
Me quedo con tu «….¿saben qué? Yo me rehúso absolutamente. Me rehúso a tener miedo de mi prójimo….», conjeturar respecto a lo que no sabemos o imaginar el mejor capitulo CSI para este caso… nos lleva al prejuicio y la intolerancia. No me gustaría que me juzquen si no me conocen…. Un poco de empatía… no???
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luisterna
27/08/2015
Definitivamente un gran comentario y una gran apreciación de este caso y de la realidad de este tema. Será compartido
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elisabethcruz
27/08/2015
Siento gran pesar por lo ocurrido,y por el dolor de las familias involucradas, me lastima cuando se hace escarnio del presunto culpable, sin que se lo haya juzgado aún. Via Crucis que tendrá que pasar él y su familia, especialmentepor los medios de comunicación que se solazan con la desgracia ajena y exponen crudamente,escudriñan y especulan sobrelos datos de lo ocurrido, mellando la dignidad de lavictima..Ya seamos ricos o pobres, famosos o anónimos, mujeres u hombres…………..» El tiempo y el suceso imprevisto nos acaecen a todos». Proverbios de la Biblia.
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Jesús
27/08/2015
Muy buen comentario compañero, pero no, los bolivianos
no somos mejor que eso.
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Enrique Salinas
27/08/2015
Somos una Socieda Joven e inexperta,……. que no sabe como manejar estas leyes que condenan a 30 años a hombres victimas de mujeres obsecionadas y Señoras con mal corte de pelo…que arremeten contra el genero masculino sin piedad….pero ellas son su peor enemigo y nuestro mejor aliado…porque no hay que leer ni entre lineas …ni interpretar su odio y radicalismo….una sociedad como la nuestra necesita mujeres que creen ……..y que no destruyan y…………. que tengan mejores cortes de pelo…..
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alejandrovilar
27/08/2015
Buena nota, aunque discrepo con nuestro visir Jaffar o Darth Vader… ¿por qué darle el rol de villano o antihéroe? cuál es su lucha incomprendida? cuál es su desorden mental u objetivo maléfico? Estoy totalmente de acuerdo en que -él y ella- son nuestro chivo expiatorio, nuestro depósito de mugres personales, pero él no es más que un borracho; asesino o con muy mala suerte.
Etiquetarlo del malvado-que-queremos-amar es sólo darle un papel de víctima.
«[…]que los únicos que valen la pena son los perritos y los gatitos» jajajajaja, touché.
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Gloria
27/08/2015
Excelente! Me tranquiliza saber que no soy la única que tiene la misma apreciación sobre este caso.
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Patricia Enríquez Cortez
27/08/2015
Sólo puedo decirte….. Excelente Esteban!!!,,,
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Alberto
27/08/2015
Muy interesante lo que mencionas excepto tal vez el penúltimo párrafo. No se que experiencias tuviste pero bueno viéndolo desde el punto local, si Bolivia no suele tener esta clase de episodios pero en otros países estos hechos son cosa de todos los dias y la gente tiene ese pensamiento pero no por miedo no por inseguridad sino por que la sociedad es así está corrompida y bueno simplemente se aprende a vivir con eso. Por lo demás es una muy buena reflexión y voy a compartir lo que escribiste.
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Enrique Salinas
27/08/2015
https://www.facebook.com/groups/822456384519082/
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Enrique Salinas
27/08/2015
Me raya como la doñita con mal corte de pelo habla en maculino, luego en femenino y leugo de nuevo en masculino y lueg en femenino, me reuso a que una deshubicada con mal corte de pelo …..pueda mandar a hombres a la carcel agarrandose de leyes y usarlas para satisfacer sus mas bajos instintos…de ODIO contra el genero masculino…hoy nos ponemos de pie porque WILLIAM SOMOS TODOS…..
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marcela antezana
27/08/2015
Desde el primer momento reclame calma…pero somos una sociedad llevada al fanatismo por los periodicos sensacionalistas y tambien por gente que desde el primer momento dio su veredicto como en la inquisicion.
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Mike Stuart Muñoz-Reyes
27/08/2015
Comparto su critica de que hay mucho pre-juicio en este caso y aveces por razones riduculas, pero tambien creo que Ud. no tiene el derecho de decir: A nadie le importan los hechos, las pruebas, la lógica. Por lo menos todos mis amigos dejan abierto un juicio final hasta saber mas. Y si me da pena ver que el ser humano en general tiene una adiccion a lo morboso, es claramente un reflejo de lo poco evolucionado que somos como raza humana. Pero me parece que Ud. ha perdido el punto mas significativo de este drama tragic. Aqui lo que está en juego es si la importancia que le dá al caso la «opinion publica» reflejado en los medios, será suficiente para frenar lo mas comun que siempre hemos visto; que con suficiente dinero se puede «arreglar» o las evidencias, o la interpretacion de ellas. Ojalá no ocurra el otro extremo, que por presion politica y miedo a un juicio contra el por prevaricato, un juez está imposibilitado de juzgarlo inocente al Kushner, pero lo mas comun es lo opuesto, la compra del «fallo». Si algo ayuda para hacer mas dificil esa costumbre en nuestra tal denominada «justicia» por tanto scrutiño, entonces los medios sociales y la prensa an ayudado a la sociedad.
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Esteban Morales B.
27/08/2015
Felicíteme a sus amigos de mi parte, me alegra saber que no todo el mundo juzga a la ligera
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Waldo Durán Andrade
27/08/2015
Excelente nota. Para recapacitar. Creo que el guante nos chantó a la mayoría (obviamente me incluyo). Felicidades Esteban.
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Anitamaria
28/08/2015
LO MAS CIERTO DE TODO ESTO ES QUE LA GENTE NO TIENE NINGUN CRITERIO, SOLO REPITEN LOS COMENTARIOS DE OTROS Y NO PIENSAN, SOLO DAN UN LIKE A FIN DE PARTICIPAR Y LISTO. ESTO PASA EN TODOS LOS TEMAS QUE SE PRESENTAN, AL PARECER EL FACE ESTA INTEGRADO EN SU MAYORIA PO PURO «CORDERITOS» IGNORANTES
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Raymi Andrea
28/08/2015
si asesinaran a una humilde salchipapera, creo que todo pasaria desapercibido…
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Carlos De Ugarte
28/08/2015
Solo puedo comentar que es una llamada a la racionalidad. Más allá es como volver a entrar en conjeturas, que a ninguno de nosotros le corresponder.
Felicidades
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Eduardo Kleeblatt
29/08/2015
¡Bien! La inteligencia y sensatez por fin dieron su voz. Lo comparto.
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Julio Zamorano Tapia
29/08/2015
Capturé la parte de «mover masas o introducir pensamientos » por éste medio haces lo misamo, es algo irónico.
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Esteban Morales B.
30/08/2015
Cierto. La verdad eso me tomó completamente por sorpresa. ¡Oh, ironía!
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chris
30/08/2015
Basura de comida masticada sin tragar. Hipócrita analogía al declarar cambiemos al mundo, pero no voy a tomar partido, me declaro pobre al interesarme por «la chusma», pero ventilo mi bronca al descartar a los que lograron influencias que yo no tengo o pretendo, y peor aun lanzando una sarta de trosquismo durmiente en varios párrafos, sin objetar nada, o dicho de otra forma » Escribir mucho, para no decir nada», y sentirme valiente por sembrar ideas maquiavélicas, detrimentando mas el pobre criterio del ciudadano de a pie
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Esteban Morales B.
30/08/2015
Trosquismo no, anarquismo. Gracias de todas formas.
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María Isabel Conde
15/09/2015
NO sé si corresponda… Esteban… sin embargo creo y te apoyo, porque la objetividad se ha perdido en el caso del cual hablamos… yo misma he intentado mover a la reflexión en la gente que esgrime la foto de Andrea como bandera de las mujeres maltratadas, abusadas y asesinadas… realmente un vano reflejo de la verdad… personalmente no la considero así a esa imagen… Por otro lado, están los varones… muchos de ellos defensores del pobre hombre acosado por una mujer OBSESIONADA… ni escribir pueden algunos… reclamando por los comentarios de la Galindo… tildándola de señora con un «mal peinado»… no se han dado cuenta de que ni tratando de rebajarla podrán llegarle a los talones por la pasión con la cual defiende su punto… sin pelos en la lengua… no importa si está o no equivocada… la cosa es que esgrime su opinión y la fundamenta… no anda solamente tirando piedras y escondiendo la mano… ella da la cara… y asume sus palabras, cosa que la mayoría de nosotros, humildes mortales… no hacemos.
Me ha gustado tu posición, porque desnuda el juego en que nos han embutido… negando a la cantidad de mujeres que realmente han sido asesinadas con alevosía y ventaja… no siempre con premeditación… en frente de sus hijos e hijas… ¿creen que el hijito de Anahí no está traumatizado? ¿los hijos e hijas que han llegado a defender a sus madres de sus agresores… sean sus padres, padrastros u otros… no están traumatizados? Creo que vivimos en una sociedad TRAUMATIZADA por el maltrato… podría confesar que MIS hij@s están traumatizados por el maltrato que he recibido en mi hogar e incluso el maltrato que yo misma he propiciado hacia mi pareja… Una vez hecho el mea culpa… me libero… yo también viví y vivo el maltrato día a día… no nos damos cuenta (o tal vez no queremos hacerlo) que en esta sociedad cada uno de nosotros aporta su granito de arena de maltrato… feminista o machista… Puede ser que nos encontremos al borde de un punto de inflexión… donde o reflexionamos como sociedad… o nos lanzamos al abismo para que en nuestros medios este y otros casos sean el pan del día y que todos sintamos el miedo de vivir…
Gracias por ayudarnos a reflexionar…
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